HUELLA ANDINA – Tras los pasos de la naturaleza

Las huellas son el recuerdo que dejan los pasos, las marcas del andar aventurero, el sello de los que van y los que vienen. Pero hay huellas que son especiales: huellas que, más que hablar del paso del hombre, son reflejo de la propia naturaleza. Este es el caso de Huella Andina, donde los paisajes marcan con sus caminos la belleza a contemplar, “des-cubriendo” aquella mixtura infinita que componen los lagos, las montañas, los árboles, las flores, la fauna… y esas maravillas que, justamente con sus huellas, nos acercan a la inspiradora diversidad de nuestra Tierra.

Huella Andina es el primer sendero de largo recorrido de la Argentina, cuyo proyecto “comenzó a gestarse de manera interinstitucional y sistemática a partir de mayo de 2010 por la Subsecretaría de Desarrollo Turístico del Ministerio de Turismo de la Nación (MINTUR), a través de la Dirección de Desarrollo de la Oferta”, indicaron sus organizadores, que han estado trabajando con múltiples actores en esta iniciativa, resultado del esfuerzo de un gran número de particulares y entidades públicas y privadas, (tanto en el plano nacional, como provincial y local). “En general colaboran las instituciones relacionadas con la promoción del senderismo, la conservación de las áreas naturales y el fomento de un turismo sustentable de las provincias de Neuquén, Río Negro y Chubut. A nivel nacional en el Marco del Plan Federal Estratégico de Turismo Sustentable 2016 y Senderos de Argentina está amparado por el MINTUR y también por APN (Administración de Parques Nacionales). Hasta el momento suman más de 30 organizaciones, grupos de interés e individuos”.

La propuesta consiste en un recorrido troncal que, con una dificultad mayormente baja-media, permite la unión de unos 540 kilómetros a través de senderos señalizados, conectando con sus caminos toda la Patagonia Norte, de Norte a Sur, “desde la zona del lago Ñorquinco en la Provincia del Neuquén hasta el área del lago Baguilt en Trevelin, Provincia de Chubut, pasando por las inmediaciones de localidades tales como Junín de los Andes, San Martín de los Andes, Villa La Angostura, San Carlos de Bariloche, El Bolsón, Lago Puelo, Cholila y Esquel”. Así, “atraviesa los Parques Nacionales de Lanín, Nahuel Huapi, Arrayanes, Lago Puelo y Los Alerces, además de reservas provinciales y territorios fiscales y privados”, y se corresponde con el corredor biológico de la Reserva de la Biosfera Andino Norpatagónica, declarada por UNESCO en septiembre del 2007.

Detrás de Huella Andina se esconde el noble objetivo de poner en valor los recursos cordilleranos, permitiendo un verdadero encuentro entre sus facetas naturales y culturales, y convirtiendo al senderismo en lo que sus coordinadores identifican con “un turismo sustentable”. A su vez, el propósito es promover actividades deportivas y recreativas en el ambiente andino patagónico, y la creación de oportunidades para la educación ambiental de las comunidades de la región y sus visitantes. A esto se le suma la idea de “constituir un nuevo producto turístico que signifique una alternativa de desarrollo para los pobladores de los Parques Nacionales y de los centros turísticos que actúen como puertas, mediante su integración como prestadores de servicios a lo largo de la traza del sendero”. Es decir, con esta iniciativa se busca la conexión entre los diversos Parques, sus instituciones y poblaciones, en una gran apertura de áreas de servicios para todos aquellos que quieran dejar sus huellas en esta aventura integral.

El recorrido está pensado para todo tipo de caminantes y no exige grandes conocimientos técnicos de orientación y cartografía, dado que todos los tramos están fuertemente señalizados para garantizar el disfrute de una experiencia fácil y placentera. Cada etapa está catalogada con un nivel de dificultad, que puede ser baja, media o alta. “Si bien ninguna senda ofrece dificultades técnicas, recomendamos planificar en forma progresiva de acuerdo a la experiencia personal. El itinerario está dividido en etapas que se pueden recorrer en una jornada. Sólo se solicita a los senderistas completar el registro de trekking en  la web de Parques Nacionales o en las cabeceras antes de iniciar la travesía. El registro es obligatorio y gratuito”, agregaron los coordinadores de Huella Andina.

¿Qué nos ofrece Huella Andina?

• Huella Andina recupera la memoria de las viejas rastrilladas, picadas y huellas y nos ofrece la oportunidad de recorrer a ritmo tranquilo los paisajes cordilleranos, de gran belleza escénica
• Nos acerca al conocimiento de la variedad y riqueza del territorio argentino patagónico, que incluye volcanes desafiantes, lagos inmensos, ríos cristalinos, bosques de araucarias, arrayanes, coihues, alerces… testigos de nuestra historia reciente
• Nos invita a una experiencia en un entorno natural único, donde podemos convivir con los usos tradicionales de los pobladores de la zona
• Es una invitación a disfrutar de la Patagonia Norte de una forma saludable y sencilla
• Nos facilita el recorrido, con un sendero intensamente señalizado, con un itinerario elegido para que sea principalmente de dificultad baja-media y con gran soporte informativo.
• Podemos disfrutar de nuestro ocio y colaborar con un turismo sustentable, respetuoso con el medio ambiente y las formas de vida tradicionales, contribuyendo a su salvaguarda.

Al término de cada etapa, los participantes encontrarán identificado un lugar donde pasar la noche, como refugios, campings, vivac, etc. Además de los carteles que acompañan los diversos caminos, se encuentran disponibles folletos detallados de cada zona que pueden solicitarse en las Oficinas de Informes. Y por otra parte, en el sitio web oficial www.huellaandina.tur.ar se encuentra actualizada toda la información, incluyendo una serie de 42 fichas, correspondientes, cada una de ellas, a las diferentes etapas del trayecto. Allí se pueden encontrar datos básicos para cada jornada, explicaciones sobre el recorrido (en sentido norte-sur), material gráfico ilustrativo, un mapa, el perfil de altura, recomendaciones, precauciones (por ejemplo, sobre el hanta virus y ocasiones de cenizas) y mucho más.

Invitamos a los lectores a sumarse a esta notable aventura, a vivir una experiencia integradora para conocer nuevos paisajes y costumbres, pero sobre todo, para descubrirnos a nosotros mismos  en la plenitud de nuestro hermoso país.