Industria
Proyecto del INN seleccionado entre los finalistas del Premio César Milstein 2023
Científicas y científicos del Instituto de Nanociencia y Nanotecnología (CNEA-CONICET) desarrollaron microesferas vítreas para potencial uso oncológico. El trabajo fue uno de los diez finalistas de la Segunda Edición del “Premio César Milstein a la Investigación en Biotecnología con Impacto en la Salud”, organizado por el CONICET y la Fundación Pablo Cassará.
En el Laboratorio del Departamento de Materiales del Centro Atómico Bariloche, de la Comisión Nacional de Energía Atómica, se logró fabricar el vidrio y un método de producción de microesferas controladas en cuanto a su composición y tamaño con aplicación en tratamiento contra el cáncer.
El proyecto titulado “Producción, caracterización e irradiación de microesferas vítreas como dispositivos prototipo para radioembolización” estuvo enfocado en el desarrollo de microesferas vítreas que contienen elementos que pueden ser activados a través de un proceso llamado activación neutrónica, que se lleva a cabo en un reactor nuclear de investigación. En él se obtienen radioisótopos para la terapia radiante. Se utiliza vidrio por sus propiedades relevantes, como la resistencia a la radiación y durabilidad química, además de tener la capacidad de ser biocompatible.
“Este año, con investigadores del RA-6 (el reactor nuclear de investigación instalado en el Centro Atómico Bariloche), empezamos a realizar pruebas de concepto que nos permitirán comparar los niveles de actividad real medidos con los esperados por diseño, detectar la presencia de impurezas y caracterizar el comportamiento de las microesferas bajo irradiación”, dijo la responsable del proyecto Yrina Viatela.
Esta tecnología se usa como estrategia terapéutica en pacientes con cáncer de hígado, a los cuales les mejora su calidad de vida, proyectando una supervivencia durante, al menos, dos años. La investigadora añadió que “en el mundo, también se están realizando investigaciones para otros tipos de cáncer, como gioblastoma o cáncer de próstata, así como también uso de esta tecnología con otras geometrías que permitan tratamientos con altas tasas de dosis”.
“Solo hay un fabricante en el mundo de microesferas vítreas a escala comercial y en Argentina se importan a un valor de US$ 20.000 la dosis. Por lo tanto, el desarrollo de este proyecto puede ser de relevancia porque acerca a la Argentina a una mayor independencia tecnológica, incluso podría convertir al país en un proveedor regional de este tipo de tecnologías nucleares para la salud”, comentó Viatela.
Como todo proceso en medicina hay varias etapas a seguir. Esta instancia corresponde a la fabricación del material a escala laboratorio, donde se pudieron construir las esferas de vidrio y se lograron todas las características fisicoquímicas necesarias. Se desarrolló un método reproducible de esferas vítreas que son de tamaño y composición homogéneo, las cuales cumplen los requisitos necesarios para poder continuar la investigación hacia las siguientes etapas de radiobiología y radiofarmacia.
El grupo de trabajo actualmente está compuesto por profesionales y técnicos provenientes de diversas áreas de la ciencia como Física e Ingeniería de la Comisión Nacional de Energía Atómica y la Fundación Intecnus y docentes y alumnos del Instituto Balseiro.
“Sabemos que es un proyecto muy ambicioso porque nosotros hacemos investigación aplicada a escala laboratorio, obviamente para que esto llegue finalmente a un paciente, requiere de la coordinación de diversos sectores de trabajo dentro de la CNEA, lo cual será un proceso que llevará tiempo pues las capacidades existen”, concluyó Viatela.
La distinción
El Premio Cesar Milstein busca visibilizar las investigaciones que pueden contribuir al desarrollo de productos o procesos biotecnológicos y fomentar la articulación entre los sectores públicos y privados en el campo específico de la salud humana. También se busca fortalecer la cooperación público-privada, la comunicación efectiva y la colaboración multidisciplinaria, así como resaltar la necesidad de políticas públicas que fomenten la investigación y el desarrollo tecnológico para brindar soluciones concretas a la sociedad.
Fuente: CNEA