COLEGIO TECNOLÓGICO DEL SUR

CTS: la historia de un esfuerzo compartido

“En el año 1999 la demanda de escuelas técnicas cuadriplicaba la oferta. Podían vislumbrarse (y sus fundadores fueron protagonistas) filas de más de 500 alumnos para inscribirse en establecimientos con orientación tecnológica, pero solo ingresaban 100. Así, entre fila y fila de esperas, se fue gestando una idea como respuesta y motivación frente a este no-cupo y ausencia de bancos”, rememora Fabiana Carbajales, directora del CTS.

“Por ese momento –continúa- hacía cinco años que había nacido una escuela cooperativa que se sumaba a la ENET ya existente de antaño, sin embargo no alcanzaba para cubrir la demanda. En ese contexto, se formó un grupo de padres que compartían la preocupación por esa falta de oferta en la ciudad de Bariloche, y posteriormente decidieron ir a VIEDMA con una camioneta gasolera para elevar su reclamo ante la entonces ministra de Educación. La funcionaria expresó lo mucho que el Estado estaba haciendo por la enseñanza y propuso que aquellos que solicitaban una mayor oferta podrían, si así lo deseaban, crear una escuela técnica.  Fue ahí donde surgió la pregunta: ‘¿Por qué no?’.

Aquellos padres y docentes agrupados comenzaron a investigar a través del INET, de Internet, y de otras instancias, diferentes planes de estudio para armar uno propio a partir de las ideas que iban surgiendo. Pronto regresaron a Viedma con un plan básico que iba de 1° a 3° año como propuesta de plan de estudios. Al principio fue recibido con poca confianza, pero era tan contundente y estaba tan bien planeado que a las 15.00 hs. de ese mismo día del mes de Octubre de 1999, fueron citados para un nuevo encuentro por la que en ese momento era la Supervisora de Educación Media. Al respecto indicó que iba a interceder por este proyecto si para el 1 de Noviembre tuvieran: a) una lista de alumnos tentativa, b) local con dos años de contrato de alquiler, 3) constitución del equipo docente y 4) una asociación de padres con personería jurídica. Como cuando hay un deseo hay voluntad, y donde hay voluntad hay trabajo, y donde hay trabajo todo es posible… ¡¡logramos cumplir los requisitos!! Entre trabajo y esas magias que brinda la vida, llegaron los primeros 68 alumnos a una vieja hostería remodelada para el inicio del primer ciclo lectivo de una escuela: COLEGIO TECNOLÓGICO DEL SUR. Tanta era la motivación que los docentes iniciaron sus funciones sin cobrar, en el fragor de vivir el idealismo de una propuesta educativa.

Para Diciembre del 2000 se presentó otra nueva condición: presentar el Ciclo Superior con una orientación no existente en la ciudad. Se nos ocurrió hacer una encuesta en el polo tecnológico de la ciudad, (Tecno Acción, INVAP, Centro Atómico) y relevar qué  técnicos  necesitaba  Bariloche, teniendo en cuenta tendencias y futuro… y la conclusión fue contundente: TELECOMUNICACIONES.

Así fue como nació nuestro colegio, gracias a la energía de todos los que apostaron a este desafío. Se fue juntando gente muy valiosa que trabajaba con un ideal, sin dinero, y por amor, y fe, a un proyecto que hoy ya tiene ¡15 años!”.

Claves de una educación integral

El Colegio Tecnológico del Sur cuenta con dos orientaciones: Tecnicatura en Electrónica con orientación hacia las Telecomunicaciones y Tecnicatura en Informática Personal y Profesional. En ese marco, los alumnos realizan numerosos proyectos en colaboración con reconocidas instituciones: “Son muchos los trabajos que a lo largo de nuestra historia se han ido desarrollando, pero debemos destacar, entre otros igualmente valiosos, el PROYECTO EOLOS, en vinculación con la empresa 500 RPM y Parques Nacionales; el Termo Dewar, en vinculación con la Universidad Nacional de Río Negro; y el Proyecto Luz para Corralito con la fundación YPF”, detalla Fabiana.

Los egresados del CTS se llevan como saldo una sólida formación que les permite una gran apertura de oportunidades: “Muchos de nuestros egresados han alcanzado un protagonismo de periódico, otros no han tenido marquesina pero sí han logrado sus objetivos, convocados a proyectos de carácter nacional o aún hoy participan y trabajan en propuestas específicas de sus formaciones o han realizado sus emprendimientos autónomos.

Cabe resaltar los casos de egresados en Electrónica y Telecomunicaciones, Promoción 2004, que se encuentran trabajando en BMW de Alemania y las sucesivas promociones que participaron de proyectos satelitales en INVAP: “Se trata de egresados que son convocados, solicitados y buscados para la soldadura y la complementación y construcción de piezas precisas para radarización, comunicación y las áreas satelitales, dada las aptitudes y adaptación con la que se forman nuestros estudiantes para el trabajo específico electrónico en todas sus implicancias y alcances. Es indudable nuestra marca personal en cuanto a la  CALIDAD EDUCATIVA POR LA APTITUD DE DESEMPEÑO ESPECÍFICO CON EL QUE LOS JÓVENES SALEN DE ESTA ESCUELA. Algunos de nuestros alumnos hoy también son docentes, generando la necesidad y conciencia del rol educativo que especialidades como estas necesitan”, precisa la directora del CTS.

-Según se informa en el sitio web del Colegio, los alumnos del Ciclo Superior suelen realizar pasantías en importantes entidades. ¿Cuál es el balance que ha estado arrojando esta experiencia en los 15 años de historia del CTS? ¿Con qué instituciones suelen concretarse tales iniciativas y cuál es el feedback que reciben? 

-“Nuestros alumnos hacen pasantías regularmente, y para ambas orientaciones, en INVAP, Athos, Tresors Casino, Parques Nacionales, Centro Atómico, Diaverum.

Es notorio el porcentaje de alumnos que, una vez realizadas sus pasantías, son absorbidos por las empresas, tanto los formados en Informática como en Electrónica. Otros, sin estar en empresas generaron sus propios emprendimientos vinculados con el perfil de egresado que buscamos en cuanto a la capacidad de pensamiento, adaptación y creatividad para la resolución de problemas”.

-Teniendo en cuenta la necesidad de la región, y del país en su conjunto, de profundizar la industria tecnológica a través de profesionales locales, ¿qué reflexión podría hacer en cuanto al aporte del CTS en ese sentido?

-“Si nos remontamos al origen de esta escuela y las encuestas al polo tecnológico que se confeccionaron y relevaron en los comienzos, queda clara la necesidad y la visión de futuro que el CTS ha tenido y sigue manteniendo fiel a sus principios, a sus motivaciones y a su nacimiento. Hoy las Telecomunicaciones son eje de nuevas miradas, aplicaciones, alcances y trabajos interdiscplinarios. Lo mismo ocurre con la Informática, orientación que hoy escuelas públicas de la ciudad bregan por tener por la complejidad de una tecnicatura en esta formación que en la actualidad se torna necesaria en respuesta a las exigencias del mercado y a las nuevas tecnologías que atraviesan tantas disciplinas académicas.

El Colegio Tecnológico del Sur no solo hace su diferencia por sus orientaciones, formación y origen, el CTS se distingue por la calidad de lo que brinda, por cómo lo damos, y porque desde el momento cero con un número que no alcanzaba una centena de alumnos hasta hoy que, la superamos ampliamente, cada uno de los que hacemos esta comunidad educativa no conocemos nombres, sino que sabemos de personas, entendemos que los procesos educativos no pueden ser potenciados de no mediar el vínculo, que no es posible formar técnicos vacíos de contenido humano y afectivo, y es por ello que es moneda corriente en nuestra escuela la permanente visita de nuestros egresados, la constitución de la escuela como espacio de referencia, crecimiento académico, sí, pero también personal, y la conformación de una educación integral, inclusiva, holística y completa, que hace de nuestros técnicos seres protagónicos de un mundo laboral más comprometido y de relación humana”.