Número 50
Editorial. SEGUIMOS CRECIENDO
Ni nuestra más excesiva imaginación hubiera pronosticado hace once años que hoy estaríamos comunicándonos con nuestros lectores en la edición número cincuenta. Esta edición merece una pequeña reflexión sobre lo acaecido, una somera síntesis en las pocas líneas de un editorial de lo que, a nuestro parecer, fue lo más sobresaliente o significativo de nuestro quehacer.
Si bien debemos reconocer nuestra imposibilidad de responder a este análisis de una manera puramente objetiva (ya que en el mismo se nos interfieren una serie de emociones encontradas), nuestra subjetividad la sabemos acompañada y comprendida por todos aquellos que habiendo emprendido cualquier empresa, han podido resistir y sobrevivir desde el año dos mil uno a la fecha.
En primer lugar es nuestro deber agradecer profundamente a todas aquellas empresas que siempre apostaron a nuestro medio y que sin cuyo aporte publicitario sería absurdo siquiera fantasear con editar y mucho menos planificar un medio de comunicación gráfico. Agradecer a nuestros colaboradores permanentes que se esmeraron desde nuestra primeras páginas en convertir a nuestra revista en un medio creíble, chequeando cada una y todos los informes, artículos y reportajes al que se ha tenido acceso, aunque no ignoramos que debe ser el lector quien afirme o rechace tal pretensión. Y por último agradecer a nuestros lectores que, durante once años, nos acompañaron en esta aventura de publicar y permanecer.
En segundo lugar rescatar el hecho fundacional de la revista desde el mismo nombre que nos identificó. Unir a la NATURALEZA con la TECNOLOGIA fue siempre nuestra pretensión, la de comunicar la necesidad de conciliar en la opinión pública estos dos términos. Ocupar con nuestro medio un espacio en la información y toma de conciencia de estos dos aspectos de la realidad que, en opiniones antojadizas, se presentaban como irreconciliables casi diríamos como una paradoja, cuando en verdad son dos caras de una misma moneda.
Con el término NATURALEZA hemos intentado englobar el cuidado del medio ambiente como la calidad de los servicios turísticos que de ella se deriva, pero también instalar al Turismo o a la industria de los servicios turísticos no solo en su aspecto puramente económico sino también en su sentido más bien filosófico, como es ser Bandera de Unión y Paz entre los pueblos.
Con el término TECNOLOGIA procuramos abarcar desde un principio tanto al Polo Científico.-Tecnológico como a la calidad profesional de sus recursos humanos y pretendiendo comunicar dentro de nuestras limitadas posibilidades, al poderoso magnetismo que este polo ejercía en nuestra economía nacional y regional.
Es notorio y nos entusiasma cuando comprobamos que nuestras actuales autoridades (aquellas en que la ciudadanía ha depositado su voto popular para responsabilizarlos en planificar nuestra economía), han manifestado públicamente su total acuerdo a este análisis de la realidad. En el Congreso de Turismo realizado en nuestra ciudad hace días (y que reflejamos en la presente edición), pudimos palpar de cerca esta toma de conciencia tan cara a los objetivos fundacionales de nuestro medio de comunicación.
Como consideramos estar en el camino correcto, solo nos resta seguir creciendo.
Roberto Santiago De Brito