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Turba para tratamientos de aguas, efluentes y derrames de petróleo
Desde la localidad chubutense de El Hoyo, la empresa Gallardón aprovecha la turba de la región para elaborar sustratos para macetas, absorbentes de hidrocarburos y sustancias químicas, así como productos biológicos mediante un laboratorio de alta escala. Además de otras aplicaciones, este producto orgánico y biodegradable puede ser sumamente útil para el tratamiento de aguas residuales, efluentes industriales y derrames de petróleo. Sustentabilidad y tecnología en una misma propuesta.
“La turba es una descomposición natural e imparcial de pastos que ocurre en determinados ambientes, fríos y húmedos. Al funcionar como un verdadero sumidero de carbono, en su descomposición total se transforma en petróleo. En su inicio es una pastura, un campo, una estepa, que convive en su mayoría con especies como cárex, totoras, palustres. Toda esa comunidad de especies en su descomposición imparcial se convierte en turba”, explica el ingeniero agrónomo Julián Barrios, director de Marketing de Gallardón.
Originalmente, la compañía comenzó con la explotación de turba –unos 40 años atrás- para la comercialización de sustratos, pero un hecho casual diversificó la historia. “En la década del ’90 los dueños se encontraban haciendo unas refacciones y se les cayó pintura la piso. Como no tenían con qué limpiarlo, se les ocurrió tirar turba y descubrieron que la pintura se había absorbido casi de inmediato”, relata Barrios.
Así surgió la turba como producto de absorción de hidrocarburos en la Argentina, aplicación que también se estaba llevando a cabo en países como Alemania, Suiza y Canadá, aunque en ese momento el acceso a la información era más limitado y se supo tiempo después.
-¿Por qué es importante que la turba tenga esas propiedades?
-La turba es un producto 100% orgánico y el insumo de preferencia en el armado de sustratos. Al poseer una estructura similar al de una fibra hueca, tiene la capacidad de absorber solventes, derivados del petróleo y grasas, y al mismo tiempo repeler totalmente el agua.
Nuestra mallín produce la turba con un 80-90% de humedad, es extraía y prensada a través de rodillos, disminuyendo el agua a un 20%. Es ahí donde tiene 2 caminos a seguir. Por un lado, obtener nuestro primer producto, TURBAPURA, un producto reconocido mundialmente que ganó varios premios internacionales por su calidad e imagen.
El otro camino, es la obtención del absorbente. Esta función tan particular se genera luego de la extracción, donde la turba pasa por un proceso de secado, produciendo una verdadera activación. De esta forma, puede capturar -tanto en suelos, aguas y subsuelos- petróleo, sustancias químicas de las más diversas y metales pesados como cobre, plomo, cadmio, magnesio, zinc, calcio, entre otros. La turba como absorbente es una tecnología muy útil para el medio ambiente: es un producto biodegradable que se puede utilizar para limpiar derrames de petróleo y otros contaminantes.
-¿Cómo es el proceso de aplicación?
-Es totalmente sencillo. Ante un derrame simplemente se espolvorea con turba y entre apenas 2 y 5 segundos se absorbe el petróleo. Luego, se la recolecta por barrido y se la retira.
-¿Y después qué se hace con la turba que ya absorbió petróleo u otros contaminantes?
-La turba es biodegradable, por lo que una vez utilizada como absorbente se la coloca en pozos como disposición final. De este modo, el petróleo estaría volviendo a su ambiente original. Pero también puede ser un subproducto de venta, comercializándola a industrias que necesitan generar energía calórica, como la del asfalto. La turba tiene una gran capacidad calorífica que aumenta al capturar petróleo. Si bien este proceso de quema emite gases de efecto invernadero, es menos perjudicial que el uso del carbón.
-¿En qué tipo de circunstancias se puede utilizar la turba como absorbente?
-En derrames de todo tipo y magnitud, tanto en suelo como en agua. En el agua tenemos la ventaja de que nuestro producto no decanta y es muy fácil de utilizar. Podría ser muy útil para efluentes de matarifes y para la limpieza de riachuelos –entre otras tantas aplicaciones- porque no sólo absorbe petróleo sino una amplia gama de sustancias químicas.
Por otro lado, tenemos un convenio con empresas de Vaca Muerta que están haciendo pozos de observación. Esta técnica hace que suba petróleo con lodo (cutting), generando derrames, lo que constituye una de las problemáticas principales del pueblo de la zona. Algunas compañías se encargan de capturar ese cutting para disponerlo en piletones y tratarlo con turba para absorber el lodo.
-Para cerrar, este costado sustentable se complementa con los productos biológicos que también ofrece Gallardón. ¿En qué consisten?
-La empresa se incorporó en la década del 90’ a una importante compañía del sector tras descubrir que la turba servía para hacer posible la convivencia de bacterias y microorganismos en general. Ambas instituciones se unieron en convenio y empezaron a producir el primer inoculante en la Argentina de soja y alfalfa. Ambas especies tienen nódulos en las raíces que generan una relación simbiótica, donde se benefician tanto las plantas como los microorganismos que conviven en sus nódulos. Ahí arranca en paralelo en el mundo el cambio de paradigma productivo que tenía la agricultura pasando a una faceta más amigable con el ambiente.
La empresa empieza a aprovechar más cantidad de turba e inicia la actividad de productos biológicos vendiendo bolsitas de 50 gramos con turba disuelta y el inóculo adentro (bacterias vivas y esporas). Al emplearse, beneficia a la salud de las plantas y su productividad.
En el laboratorio hacemos muestreos, inoculantes y biofertilizantes. Hay entusiasmo en poder avanzar en esa actividad, que es lo que el sector agrícola mundial está demandando. Hay diversidad de productos biológicos que pueden ser complemento o reemplazo de productos químicos.
Por último, también estamos trabajando en la regeneración de las turberas, aunque la tasa de extracción es baja si comparamos la tasa de renovación. Esto es evidenciado en trabajos in situ que demuestran el avance de turbas jóvenes recién formadas en los primeros piletones.
En paralelo, nos encontramos avanzando en la utilización de los piletones como cisternas al servicio de los bomberos y en la producción natural de truchas por escorrentía de arroyos internos. El compromiso con la naturaleza siempre está presente en nuestras actividades.